La visita real

Al llegar a Quito, la pareja real de Inglaterra fue calurosamente recibida,
El pueblo demostró una gran simpatía hacia este glamoroso matrimonio.
El príncipe Carlos y su actual esposa que de princesa solo tiene el título, visitaron nuestro país con la intención de viajar a las islas galápagos y dedicarle honores de calidad real.
Son patrañas de imperialistas que no pintan nada en el mundo. Su dedicación por el medio ambiente es un claro ejemplo de la hipocresía europea, aclarando que Inglaterra es uno de los países que más ha atentado contra la dignidad y pudor de la naturaleza.
Solo pondré el ejemplo de África en donde principalmente los ingleses han hecho lo que se les ha venido en gana; la explotación a los recursos africanos son evidentes. Los diamantes son causa de guerras civiles que han provocado daños sociales, ambientales, políticos; conflictos irreparables de terror que han sumergido en dolor y miseria a los pueblos africanos.
O que me dicen de la humillación a la que han sometido a nuestro hermano país de Argentina, violando sus derechos geográficos; las Malvinas son por derecho de la república Argentina; pero, como todo país “omnipotente” Inglaterra se apoderó de este territorio, como se dice popularmente por las buenas o por la malas. En un guerra ciega Inglaterra derrotó sin ninguna dificultad a un país que solo exigía lo que por derecho le pertenece, obviamente en toda guerra hay una gran contaminación.
El hecho de que el príncipe y su “digna” esposa visitaran las encantadas islas patrimonio del Ecuador y del mundo, es un acto de etiqueta, donde buscan tener una imagen positiva a los ojos de Sudamérica.
Al verlos, nos da una impresión de pareja perfecta, de modelos de ética y buenos principios. Habrá que clarificar este punto, Carlos fue el esposo de la fallecida princesa Diana, a quién engañó con su actual esposa Camila, mujer que no merece el título de realeza. Además es acusado de ser Gay, esto no significa que esté mal; pero, ¿Por qué juega doble?
A mí no me interesa la vida personal del “príncipe”, lo que me molesta es que mi pueblo lo reciba como a un héroe y que se lo vea como un ejemplo de bondad, honestidad y buenas intenciones de apoyo a nuestro país; la verdad es diferente, no caigamos en la realidad paralela.
Los buitres reales han realizado un viaje de patrañas y mentiras a nuestro país, solo el tiempo me dirá si el apoyo que ofrecieron tuvo buenas intenciones o es una mentira mas de los europeos hacia la belleza de nuestro continente. E.V EDUARDO VASCO.